viernes, 13 de abril de 2007

¿Son correctas las actuaciones en la laguna de El Padul?

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1 comentario:

Anónimo dijo...

En principio, es un inicio para atraer al visitante medioambiental a un espacio tan olvidado hoy día. Sin embargo, se echa en falta una dotación y apertura del centro de visitantes adecuado a las necesidades del entorno y a su singular historia natural, geomorfología, paleontología, fauna, etc.

Veo las obras efectuadas deficientes en lo siguiente:

Casetas obseración: La de la madre maestra falta dotarla de una pantalla visual adecuada,para no espantar las aves al llegar y abrirla, que ahora es como un mirador cerrado. También es necesario una pronta reparación del tejado, del que se vuelan las láminas impermeables que le colocaron.

Caminos: decididamente, la capa de zahorra es un error y un pastiche visual que no corresponde paisajísticamente con el entorno. Se podría disimular con una capa de tierra prensada; así no se haría ruido al caminar, espantando todo bicho viviente a leguas. Es una gran idea dotarlas de pasarelas de tablones encima, como en las de Doñana, así de paso funcionan como refugios artificiales para anfibios y pequeños reptiles (eslizones, lagatijas, culebritas, salamanquesas...).

Torre de observación: En un futuro, la idea de una torre tipo Tablas de Daimiel sería un gran acierto, pues el problema actual es la falta de puntos elevados sobre el carrizal para observar aves y paisaje

Cortado de rodales de carrizal: apertura selectiva de rodales para dejar el barro al aire y crear mosaico de paisaje y buenos puntos para la observación de rálidos, agachadizas, bisbitas, etc. Se podría hacer una caseta junto a ellos, con la infraestructura necesaria asociada.

Puentes: he visto motos que pasan por encima. Una barrera para vehículos de motor no vendría mal.

Panales informativos: se echan en falta paneles temáticos ubicados durante el recorrido

...y una adecuación del mirador del Ojo oscuro.

Por último no quisiera despedirnme sin mencionar la caída del majestuoso y centenario sauce que dominaba la turbera del Aguadero. Posíblemente en su muerte haya tenido que ver la caída del nivel freático en que se dejó la zona con la apertura del dique central... Alguien dijo que los árboles mueren de pie; este coloso otero sin embargo ha sido derribado; espero que no lo sea nunca la magia de este humedal que aún pervive en sus fantásticos rincones.